La impresión de tarjetas abiertas es una tecnología que se remonta a la época en que se utilizaban estampadoras de metal y tarjetas. En aquella época, los ordenadores centrales enviaban comandos de texto a las estampadoras para personalizar una tarjeta o etiqueta. No había ningún controlador de dispositivo entre el ordenador central y la estampadora. La impresión de tarjetas abiertas solía ser utilizada por grandes productores de tarjetas, como compañías de seguros, proveedores de servicios sanitarios, instituciones financieras y el sector del juego para las tarjetas de jugador de casino.

Esta tecnología ofrece velocidades de transferencia de datos muy rápidas y ocupa muy poco ancho de banda en una red. Hoy en día continúa en algunas industrias, la más frecuente en el sector del juego. Hoy en día, la mayoría de los grandes casinos utilizan tecnología de impresión de tarjetas abiertas para emitir tarjetas de jugador a sus clientes. La tecnología avanza, los ordenadores son más rápidos, las redes wifi están por todas partes, pero la impresión de tarjetas abiertas sigue prosperando por sus ventajas.

La tecnología de impresión de tarjetas abiertas requiere cierta inteligencia en la impresora. La impresora tiene que ser capaz de interpretar los datos de texto para producir una tarjeta de jugador aceptable, día tras día. Los proveedores tradicionales de impresoras de tarjetas abiertas ofrecían soluciones difíciles de instalar, modificar y mantener.

Requerían múltiples cambios de configuración en la impresora utilizando sólo dos o tres botones para navegar por un árbol de decisiones largo y confuso. Los casinos se sentían tan desalentados por estos difíciles requisitos que a menudo subcontrataban la instalación, configuración y mantenimiento, lo que les costaba miles de dólares extra al año.

IDP, interesada en el mercado, estudió los retos actuales que experimentaban los usuarios finales e introdujo la impresora SOLID-500 OC en 2014. La impresora fue revolucionaria y tuvo una buena acogida. IDP y sus socios crearon un sistema con una exclusiva tecnología XPress Connect Hot Swap y una aplicación de software para configurar de forma sencilla y rápida una impresora para que funcione en cualquier entorno heredado. El SOLID-500 OC era tan adaptable que, hasta la fecha, nunca ha dejado de funcionar en un entorno heredado.

Hoy, el SOLID-500 OC se ha actualizado al SOLID-510 OC. La nueva impresora ofrece una tolva de alimentación de tarjetas más grande, opciones Wi-Fi y sigue siendo la única impresora con marco metálico del sector. Los clientes han ahorrado miles de dólares al reducir su tiempo de inactividad y eliminar los costosos planes de servicio.